Retrato de un balneario
Quedó pendiente una excursión
Y decidí planteársela recientemente
El viernes salíamos hacia allí
Y hemos vuelto hoy
Conduje 250 kilómetros
El lugar prometía
Cercano a un pueblo de 45 habitantes
En medio de un páramo
Pero mientras nos acercábamos
La carretera se volvía más sinuosa
Desembocando en una especie de hoyo entre montañas
Al ver aparecer la fortificación
Les dije a mis padres:
Parece El resplandor
Por fortuna había 4 coches en el parking al aire libre
Ya era algo
No estábamos solos
Del todo
Llevamos con nosotros al perro
Apeé a mis padres con las maletas en la entrada
Y me fuí con él a aparcar
Al llegar a recepción mi madre estaba haciendo los trámites
Estábamos a 4 grados en el medio día
Lo siguiente sería ver la habitación
Al principio no caí en la cuenta
La decoración del lugar estaba hecha toda a base de motivos africanos
Cuando entré a aquella habitación
La cama más grande que jamás he visto me recibió
Bajamos a comer
Un menú de apariencia sofisticada
Pero solo apariencia
Aunque no estaba mal
El camarero nos sirvió vino que no pude terminar
Y comentó algunas cosas con mi padre
Como que él también procedía de nuestra ciudad
Empezó a agobiarme la compañía
Suelo preferir la soledad
Pero me sentía afortunado de estar allí con ellos
Una especie de seguridad me cubría
Y mi madre en uno de aquellos momentos manifestó sentirse enormemente feliz
A mi parecer, era suficiente
Los dejé con el café y me subí a dormir
Al despertar tenía un mensaje de una chica de la aplicación de citas
Pasé toda la tarde escribiéndome con ella
Pero no funcionó
Aunque se despidió instándome a un segundo encuentro
La saludé a la mañana siguiente y ya no he vuelto a saber
La hora de piscina era a las 7 de la tarde
Y no acudí por estar en esa conversación
La cual se desvaneció a esa misma hora
Cuando esta chica se despedía
"Lígate a alguna", me escribió un colega
Y había chicas del personal bonitas
Pero estaba difícil
Y yo no sé hacer esas cosas
A la noche bajamos a cenar
El camarero era otro
Éste servía el vino cogiendo la botella por el centro
Mientras que el anterior lo hacía más elegante, por el culo
Yo prefería a aquél
Del otro me di cuenta luego que era demasiado afable
Hasta un punto entrometido
Lo vi apoyar una mano sobre la mesa de unos comensales
Y avanzar ligeramente la cabeza para preguntarle a dos chicas si era todo de su gusto
Era un trabajo de mierda, al fin y al cabo
Aquella noche logré dormir fantásticamente
Y la siguiente no sería menos
Poco a poco iba descubriendo la decoración del sitio
Adornaban las paredes máscaras artesanales
Los rincones lanzas y espadas de la misma guisa
Cestos
Estatuillas extrañas
Y dos fotografías en el acceso a la cafetería de un chico negro y una chica igual
Mi padre elucubró que tal vez eran los dueños
Y finalmente acabó por desvelar el misterio preguntando a la recepcionista
Al parecer todo aquello provenía de la fascinación de la dueña por Kenia tras uno de sus viajes
Luego el negocio se había traspasado a una cadena
Pero la decoración se respetó
Entretanto yo salía mañanas, tardes y noches a sacar al perro para que mease
Aún así se meó en una de aquellas sobre la alfombra
El perro dormía conmigo
Ha sigo mi gran compañero toda la estancia
Le cogió el gusto a aquella cama pronto
Se acurrucaba en mí y yo a veces lo abrazaba
Hay que decir que es un perro flaco
Hicimos una pequeña ruta después de desayunar
Caminamos por un sendero olvidado de la mano de Dios
Una media hora
Hasta que volvimos
En tiempos remotos había vivido gente por allí
Y se veía alguna que otra casa derruida
Desde lejos podía apreciarse la totalidad del hotel
Que no era muy estético por fuera
Paredes desiguales
Color grisáceo
Y una estructura como de nave industrial
Pero por dentro era otro cantar
Me preparé para bajar a la piscina esta vez
Unos albornoces blancos y toallas todo bien doblado se disponían en cada habitación para los huéspedes
La piscina y balneario eran un gran concepto
Pero el agua es costosa de mantener y puede con todo
Así las imperfecciones y desgaste de las instalaciones eran numerosas
Lo que no me impidió disfrutar de un buen baño probando algunos chorros
En la cena anterior me había inmiscuido en la conversación de una familia
Un matrimonio y su hija pequeña
Hablaban de tomar un avión
Un viaje muy largo al parecer
Donde el avión debía hacer una parada para repostar
Así se lo explicaba el padre a la niña
Que se emocionaba con la idea
Y su rostro era de felicidad plena
Coincidimos con ellos en aquella sesión de baño
Y con un par de parejas
De las cuales la primera había ocupado el pequeño jacuzzi
Todo era fantástico
Probamos mis padres y yo las distintas piscinas
Una tenía una abertura por la que se accedía al exterior
Puro frío pero bajo el agua se mitigaba
En fin, luego comimos
Después más siesta, más cama
Y al anochecer bajé con mi madre a la cafetería a tomar una cerveza
No había nadie
A pesar de que el hotel se iba llenando
Una música ténue acompañaba
Con una letra minimalista que hubiese preferido que no estuviese
Reposábamos en unos grandes sillones
Lo siguiente sería cenar
Y estuve tentado de pasar del menú del día que era el mismo para la comida y la cena y pedir una hamburguesa en esa cafetería
Al final cené lo que había
La noche me acogió de nuevo
Me dormí casi al instante
Despertándome de madrugada a mear
Y seguí durmiendo con facilidad
Hoy ya es lunes
Empecé a escribir esto anoche
He visto pueblos
He conocido parajes
A mi juicio ideales para vivir
Pero en ellos no hay casi nadie
La idea de escribir mi novela sigue latente
Quizá un retiro semejante sería lo ideal
Aquí es más de lo mismo
Aunque ahora estoy tranquilo
Después de todo
He venido de relajarme
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